Quien sufra o haya sufrido alguna vez visión doble o diplopía sabe que es un fenómeno desagradable y que asusta a quien lo padece.
En este artículo vamos a revisar los factores más importantes relacionados con la visión doble.
¿Qué es la diplopía o visión doble?
La diplopía o visión doble es una alteración visual que consiste en la percepción de dos imágenes de un mismo objeto. Esta visión doble puede afectar a un solo ojo o a ambos.
Hay que tener en cuenta que esta condición denota que algo no funciona correctamente en nuestro sistema de visión y, por ello, es indispensable acudir al médico para que pueda llevar a cabo una revisión del estado del paciente.
¿Qué tipos de diplopía existen?
Existen diferentes tipos de visión doble:
- Puede ser horizontal, vertical o diagonal, según cómo se superpongan las imágenes.
- Además, la visión doble puede afectar solo a un ojo (diplopía monocular) o a los dos ojos (diplopía binocular). En el caso de la diplopía binocular desaparece cuando se cierra uno de los dos ojos.
- La visión doble puede darse de manera puntual o continuada.
En cualquiera de los casos es importante acudir al médico cuando el paciente comienza a percibirla, ya que puede estar originada por una enfermedad grave.
¿Cuáles son las causas de la diplopía monocular?
Los seres humanos tenemos una visión tridimensional gracias a que tenemos dos ojos. Nuestros ojos miran siempre al mismo lugar, permitiendo que el cerebro procese las imágenes de ambos ojos como una sola imagen; esto nos permite tener mejor percepción de la profundidad.
Abrir los ojos y ver una sola imagen es algo que damos por hecho, pero el proceso para que esto suceda implica la perfecta coordinación de varios componentes del sistema visual, tales como la córnea, el cristalino, los músculos que dentro del ojo permiten enfocar y los que lo rodean y sujetan, el nervio óptico y el cerebro.
Cualquier problema en cualquiera de estos elementos puede causar la visión doble monocular:
- Problemas de la córnea: los problemas de la córnea suelen provocar visión doble que afecta a un solo ojo. Si el ojo afectado se tapa, la visión doble desaparece. En estos casos, la diplopía se puede deber a que la superficie de la córnea es irregular y distorsiona la luz que entra al ojo. El queratocono es la causa más común de visión doble en un solo ojo, aunque hay otras, tales como los herpes, cicatrices y sequedad ocular.
- Problemas del cristalino: los problemas que afectan al cristalino se suelen presentar, sin embargo, en ambos ojos a la vez. La causa más común son las cataratas, que, afortunadamente, pueden ser solucionadas con cirugía ambulatoria.
- Problemas de la retina: como la membrana epirretiniana.
- Problemas musculares: si alguno de los músculos que sostienen al ojo es débil, el ojo no podrá moverse con precisión, causando visión doble. Esto puede estar causado por un mal funcionamiento del sistema neurológico o por enfermedades que le afecten, como la miastenia gravis.
- Problemas del nervio óptico: existen diversas enfermedades que pueden afectar a este nervio. Algunas de estas enfermedades son la esclerosis múltiple o la diabetes que, cuando no es tratada, causa todo tipo de problemas de salud, incluyendo daños en los nervios.
- Enfermedades neurológicas: como la parálisis de los nervios oculomotores
- Traumatismos orbitarios.
- Enfermedades tiroideas.
- Diferentes tipos de estrabismos: estrabismos que aparecen tras una cirugía ocular, estrabismos del paciente miope, algunos estrabismos infantiles que perduran hasta la edad adulta o estrabismo sensorial (se produce cuando uno de los dos ojos tiene una visión baja).
- Problemas cerebrales o del sistema nervioso central.
¿Cuáles pueden ser las causas de la diplopía binocular?
Además de la visión doble monocular, una persona también puede presentar diplopía binocular. Es decir, visión doble en ambos ojos. Las posibles causas son variadas, pero las más habituales suelen ser las siguientes:
- Diabetes u otras enfermedades graves: sobre todo aquellas que afectan al control de los músculos de los ojos. Son conocidos los casos en que algunos pacientes sufren de doble visión por culpa del engrosamiento de dichos músculos.
- Enfermedad de Graves: que es a su vez la causa más conocida de la tiroides hiperactiva o también llamada hipertiroidismo.
- Golpes o traumatismos: por ejemplo las lesiones que afectan de forma directa o indirecta a la órbita de los ojos. Los diagnósticos más severos son aquellos que, además del traumatismo, revelan fracturas en esta zona.
- Estrabismo o desviación de los ojos: que impide que tengamos pleno control del punto de enfoque de la visión. Esta situación afecta tanto a los niños como a los adultos, aunque es más habitual entre los más pequeños, ya que afecta al 4% de los menores de 6 años.
- Problemas cerebrales y neurológicos: los problemas cerebrales también pueden afectar a la correcta visión, ya que el procesado final de imagen se produce ahí, aparte de que controla los nervios. Apoplejías, aneurismas, alta tensión cerebral o los tumores e, incluso, la migraña pueden ser causantes de visión doble.
- Abuso de alcohol o drogas.
- Consumo de ciertos medicamentos.
- Cansancio o fatiga.
¿Existen factores de riesgo vinculados con la diplopía o visión doble?
Algunos de los factores de riesgo más habituales vinculados con la diplopía o visión doble son los siguientes:
- Diabetes.
- Hipertensión.
- Problemas cardiovasculares.
- Estrabismo.
- Consumo de determinados medicamentos o sustancias.
¿Qué síntomas la acompañan?
Como hemos comentado, la diplopía es un síntoma en sí misma, pero sí pueden aparecer ciertas señales o indicios que pueden acompañarla:
- Cervicalgias crónicas o tortícolis compensatorias. En ocasiones, los pacientes con visión doble ladean la cabeza para tratar de ver mejor o compensar la diplopía. Esta posición del cuello puede mantenerse en el tiempo y provocar inflamaciones, dolor y malestar.
- Tendencia a guiñar uno de los ojos.
- El paciente generalmente manifiesta tener dificultades para desarrollar actividades cotidianas como conducir o leer.
¿Cómo se diagnostica?
La visión doble no se considera una enfermedad en sí misma, sino un síntoma que refiere el paciente y que suele ser bastante llamativo, ya que produce incomodidad visual y muchas limitaciones. Por esta razón, el diagnóstico diferencial es vital para discriminar la gravedad de la visión doble.
En la consulta, para llevar a cabo un diagnóstico y determinar por qué el paciente ve doble, el oftalmólogo realiza una exploración completa que incluye:
- Valoración de la motilidad ocular: se analiza la capacidad del paciente para realizar movimientos oculares de manera coordinada. De esta forma, se puede determinar si hay un músculo que no funciona correctamente (parálisis) o que está realizando una hiperfunción.
- Pruebas de ortóptica: permiten saber si el movimiento y estado de los ojos es adecuado.
- Pruebas complementarias: estas pruebas sirven para descartar otras enfermedades sistémicas, como problemas de tiroides, enfermedades infecciosas o autoinmunes. Estas pruebas pueden ir desde una analítica a una resonancia magnética o un electromiograma.
¿Qué tratamientos están recomendados para la diplopía monocular?
Los tratamientos para la diplopía monocular deberán adaptarse a las causas de cada caso. Algunos de los más habituales son los siguientes:
- Uso de gafas o lentillas correctoras adaptadas al problema de visión concreto.
- Utilización de un parche para cubrir el ojo afectado.
- Realización de ejercicios oculares que permitan rehabilitar los músculos oculares.
- Cirugía.
¿Qué tratamientos están recomendados para la diplopía binocular?
En el caso de que un paciente tenga visión doble, el primer paso es detectar qué la ha causado. Muchas de estas causas tienen tratamiento y, en cada caso, se aplicará un tratamiento u otro.
Algunos ejemplos son los siguientes:
- Infecciones bacterianas: este tipo de infecciones se tratan con antibióticos.
- Infecciones víricas: este tipo de infecciones se tratan con antivirales.
- Diabetes: en este caso, se deberá administrar insulina al paciente y se establecerá la pauta crónica para su administración.
- Queratocono: el tratamiento del queratocono puede hacerse mediante gafas o lentillas especiales o con cirugía.
- Cataratas: esta enfermedad ocular se puede solucionar mediante una operación que permite sustituir el cristalino natural del ojo por una lente intraocular.
Por otro lado, si no se puede tratar la visión doble, también existen tratamientos complementarios que permiten mejorar la calidad de vida del paciente y ayudan a que la persona conviva con este problema.
¿Existe algún tratamiento específico cuando su causa es el estrabismo?
La visión doble puede suponer una merma importante de la calidad de vida, ya que comporta una importante dificultad para realizar las actividades diarias. En el caso del estrabismo, el tratamiento más adecuado debe ser valorado por el oftalmólogo, en función del grado de desviación y las características de la patología.
Cuando el estrabismo afecta a ambos ojos (estrabismo binocular) se suele realizar una cirugía específica, que tiene una gran tasa de éxito muy elevada. Esta cirugía consiste en la corrección de los músculos oculares, ya sea debilitándose, reforzandose o cambiándose de posición, con el fin de colocar el ojo en la posición adecuada, evitando así la visión doble. Esta intervención se realiza casi siempre de forma ambulatoria y con anestesia tópica, aunque en algunos casos se recurre a la anestesia general.
Por el contrario, si el estrabismo afecta solo a un ojo (estrabismo monocular) se suele recomendar un tratamiento con lentes especiales (prismas) o el uso de un parche en el ojo que funciona correctamente.
Artículo revisado por el Dr. Carlos Laria, oftalmólogo de Clínica Baviera
Fuentes
Academia Americana de Oftalmología – Visión doble
Tengo dos amigas que se iban a operar aquí, y ya me encargaré de avisarlas por lo menos que no se quede como yo, con ese mal sabor de boca.
