La visión nublada es un trastorno caracterizado por ver mal los objetos situados a media o larga distancia o por problemas en la visión cercana, al tener la sensación de que las letras se mueven ante nosotros.
Las causas son muchas y heterogéneas, desde problemas de refracción a enfermedades leves, como la migraña, o graves, como por ejemplo una esclerosis múltiple.
Por este motivo, y en especial si este problema de visión aparece acompañado de otros síntomas como dolores de cabeza, mareos, cansancio o náuseas, es preciso acudir a un especialista para su diagnóstico y tratamiento.
¿Por qué se me nubla la vista?
Aunque las enfermedades y problemas de la vista se pueden manifestar con muchos síntomas, la pérdida de visión o vista nublada suele ser uno de los más comunes. De hecho, son muchos los pacientes que acuden a la consulta del oftalmólogo y afirman: se me nubla la vista.
Sin embargo, debido a que la vista nublada es un síntoma muy común a muchas enfermedades o problemas de la vista, el oftalmólogo necesita realizar una serie de pruebas que le permitan determinar con más concreción qué tipo de problema es al que se enfrenta el paciente, así como determinar cuáles son las causas concretas de la vista nublada.
Como se ha mencionado, existen muchas causas distintas que pueden fomentar la vista nublada. De hecho, aunque suele ser un síntoma asociado a diversos problemas de visión, también puede darse el caso de que se trate de un síntoma pasajero y que, después del correspondiente chequeo médico, no se encuentre ninguna patología que pueda explicarlo. Sin embargo, para descartar cualquier posible complicación , es necesario que sea un oftalmólogo quien lleve a cabo el correspondiente chequeo de la vista, especialmente si los episodios de vista nublada son frecuentes.
Algunos de los problemas visuales que pueden estar asociados a la vista nublada son los siguientes:
Miopía
Se trata de un defecto en la forma que tiene el ojo a la hora de enfocar los objetos lejanos, lo que hace que se aprecien de forma borrosa y, en ocasiones, cuando se trata de enfocar la imagen y se fuerza el ojo, puede provocar que se nuble la visión de forma temporal.
Hipermetropía
Es similar a la miopía pero en sentido inverso. Es decir, la imagen se ve borrosa en las distancias cortas. Al igual que sucede con la miopía, cuando se fuerza el ojo para poder enfocar correctamente la imagen, esto puede llegar a producir que se nuble la visión.
Astigmatismo
En este caso, la visión borrosa se produce indiferentemente de si se trata de un objeto que está lejos o cerca del ojo. De nuevo, forzar la vista para poder enfocar correctamente puede producir episodios concretos de visión nublada.
Presbicia o vista cansada
Se trata de un problema de la vista derivado de la edad. Es común a partir de los 45 o 50 años, y suele corregirse con el uso de gafas o lentes de contacto. Uno de los principales síntomas de la vista cansada o presbicia es la sensación de vista nublada de cerca.
Cataratas
Se producen como consecuencia de la edad y consiste en que el cristalino del ojo se va volviendo paulatinamente más opaco, dificultando de este modo la visión y pudiendo producir episodios de visión nublada.
Hipoglucemia
Se debe a un descenso brusco del azúcar en sangre que puede manifestarse como vista nublada o borrosa momentánea, así como desorientación. Aunque no es una enfermedad relacionada directamente con la vista, es importante localizar la causa que la provoca y adoptar el tratamiento más adecuado en cada caso.
Migraña ocular
Además de la visión nublada o borrosa y destellos, suele ir acompañada de fuertes dolores de cabeza y, en los casos más severos, incluso de mareos y vómitos.
Ojo seco
Se trata de un problema muy común de la vista derivado de una lágrima insuficiente o de mala calidad. En la mayoría de los casos, se soluciona fácilmente con la aplicación de lágrimas artificiales que compensen la insuficiencia de lágrima natural de los ojos del paciente. El ojo seco también puede provocar visión borrosa.
Diabetes
La diabetes es una enfermedad que tiene su origen en la incapacidad del páncreas para producir suficiente insulina y, en consecuencia, regular correctamente la cantidad de azúcar presente en sangre. Cuando esto pasa, algunos tejidos del cuerpo pueden verse afectados y resultar dañados. Uno de estos es el aparato ocular en su conjunto. De hecho, la visión nublada puede ser un síntoma de una diabetes no diagnosticada, por lo que es muy importante descartar esta patología lo antes posible.
Ansiedad
Existen casos en los que el exceso de estrés, así como la tensión acumulada durante mucho tiempo, pueden manifestarse en forma de visión fluctuante y mareos.
Enfermedades neurodegenerativas
Por otro lado, también cabría la posibilidad de que se tratase de una enfermedad relacionada con el sistema nervioso. En estos casos, se trata de enfermedades con una gran variedad de síntomas, entre los que se incluirían algunos que afectarían a la visión. La esclerosis múltiple es una de ellas. Se trata de una enfermedad neurodegenerativa que trae como consecuencia muchos problemas en la vista, entre ellos la visión borrosa.
Enfermedad de Graves
Es una enfermedad grave que afecta a la glándula tiroides y se manifiesta por el aumento de la frecuencia cardíaca, la presión arterial elevada, los temblores y la visión borrosa, entre otros síntomas.
Embarazo
La visión borrosa, en ocasiones acompañada de visión doble (diplopía), es bastante común en el embarazo. Esto es debido a los cambios hormonales, que pueden alterar la forma y el espesor de la córnea, provocando problemas en la visión. Casi siempre es una alteración transitoria que no reviste mucha importancia, pero debe ser controlada por un médico, ya que también puede ser un síntoma de diabetes gestacional o tensión alta.
Traumatismos
También se puede producir vista nublada después de un golpe en los ojos.
¿Qué tratamientos y soluciones existen para la vista nublada?
La visión borrosa puede ser un síntoma de afecciones y patologías importantes, que pueden llegar a comprometer la visión como: desprendimiento de retina, agujero macular, determinadas infecciones oculares o glaucoma. Todas estas patologías requieren la intervención lo más urgente posible de un especialista para diagnosticar cuanto antes el problema y poner en marcha el tratamiento, que puede ser farmacológico o quirúrgico.
- Cuando un paciente llega a la clínica oftalmológica y afirma tener la vista nublada, existen muchas posibles causas que pueden estar detrás de este síntoma. Esto hace que lo primero que haya que hacer es estudiar a cada paciente para identificar correctamente cuál es la causa de la visión nublada y, a continuación, aplicar el tratamiento más adecuado en cada caso.
- La exploración practicada por el oftalmólogo permitirá comprobar el estado de sus ojos. Así mismo, el facultativo le preguntará por otros síntomas que pudieran estar relacionados con la visión nublada y por su historial clínico y familiar, ya que algunas enfermedades de tipo genético o degenerativas, como la diabetes, podrían estar relacionadas con estos episodios.
- El oftalmólogo, después de llevar a cabo las pruebas que considere oportunas, determinará el tratamiento más adecuado para cada caso, así como los hábitos que el paciente deberá seguir durante dicho tratamiento y en su vida diaria.
De este modo, según sea el caso, se podrán optar por diferentes tratamientos adaptados para cada tipo de problema.
- En el caso de que la visión nublada tenga su origen en un problema refractivo como pudieran ser la miopía, hipermetropía, astigmatismo o presbicia, algunas de las soluciones más sencillas pasarían por el uso de gafas o lentes de contacto o, si se prefiere, mediante cirugía para corregir el defecto del ojo según cada caso.
- Cuando el origen del problema es la opacidad del cristalino (cataratas), la única solución viable es sustituirlo por una lente intraocular mediante una sencilla intervención.
- Por otro lado, el uso de lágrimas artificiales puede aliviar o mitigar los síntomas del ojo seco.
- Así mismo, en el caso de que la causa de la visión nublada no esté en el ojo, sino que simplemente se trata de un síntoma que se manifiesta en este órgano, se deberá adoptar un tratamiento acorde a cada caso, como por ejemplo sucedería en el caso de que la causa fuera una diabetes no diagnosticada.
¿Cómo evitar la visión borrosa?
Lo primero que conviene saber es que no siempre es posible prevenir la aparición de los síntomas de visión borrosa. En cualquier caso, se recomienda usar gafas de sol y extremar la higiene si es preciso manipular la zona de los ojos (por ejemplo, al poner o quitar las lentes de contacto o al maquillarse /desmaquillarse).
Otras formas de evitar la vista nublada son:
- Reducir el estrés y la ansiedad.
- Descansar la vista. Es fundamental interrumpir el trabajo constante delante del ordenador o la tablet con pausas cortas, durante las cuales debes mirar al horizonte y exponerte a la luz natural.
- Cuidar la alimentación. Una dieta sana en frutas, verduras y pescado azul, sin grasas saturadas y abundante en alimentos ricos en vitaminas A y C y antioxidantes (zanahorias, papaya, brócoli…) es la mejor aliada de la vista, ya que previene las enfermedades oculares o generales que la dañan y ayudan a retrasar el envejecimiento. Otra cuestión fundamental es beber mucha agua para mantener todo el cuerpo hidratado, incluyendo la vista.
- Hábitos de trabajo más saludables. Debemos acostumbrarnos a mantener las pantallas de los dispositivos alejadas suficientemente de los ojos (al menos 40 centímetros en el caso de los ordenadores) y a no forzar la vista ni leer con luz insuficiente.
Las anomalías visuales, como la vista nublada, deben ser siempre valoradas por un especialista para que haga un diagnóstico adecuado del mismo y valore las posibles soluciones.
¿Cuándo debo acudir al médico?
Como se puede deducir, la vista nublada tiene un espectro muy amplio de posibilidades a la hora de buscarle un origen. Por ello, lo más recomendable ante un episodio de vista nublada, especialmente si se trata de visión borrosa repentina, será acudir al oftalmólogo lo antes posible.
De esta forma se puede realizar una exploración de los ojos y descartar cualquier problema potencial o enfermedad grave y, en el caso de encontrarla, adoptar las medidas de tratamiento lo antes posible.
En el caso de la visión borrosa en embarazadas y en niños, también es aconsejable acudir al especialista.
Fuentes:
https://www.intramed.net/95654
https://es.pearlevision.com/pv-us/eye-health/glossary