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Los granos en el ojo aparecen en el párpado o en la propia superficie del ojo. Se pueden presentar como uno solo o como varios al mismo tiempo. La aparición de un quiste de grasa o grano en el ojo es una de las causas más comunes por las que muchos pacientes acuden al oftalmólogo.

En la mayoría de los casos son benignos. No obstante, se trata de un problema que puede ser molesto y poco agradable desde un punto de vista estético. Por ello, muchos pacientes acuden a la consulta del oftalmólogo para poder retirarlos. Si quieres saber más sobre este problema tan común sigue leyendo y te contamos todo lo que necesitas saber al respecto.

¿Qué tipos de quistes de grasa o granos en los ojos existen?

Según la zona en la que se encuentren, podemos distinguir entre granos dentro del propio ojo y granos en el párpado:

Granos dentro del ojo

Los granos o quistes de grasa pueden aparecer en la conjuntiva, es decir en la parte blanca del ojo, como unas manchas amarillas y ligeramente abultadas. Estos granos suelen ser bastante comunes y benignos y se pueden corresponder con dos tipos de lesiones:

  • Pinguécula: se trata de una protuberancia benigna que se desarrolla en la conjuntiva del ojo. 
  • Pterigion: es similar a la pinguécula pero, en este caso, se desarrolla con apariencia de tela o tejido. Aparece siempre cerca de la córnea. 

En general, estos granos dentro del ojo no requieren tratamiento, a no ser que provoquen problemas de visión o algún tipo de molestia. En este caso, se pueden eliminar mediante una cirugía sencilla que se realiza con anestesia local.

Granos en el párpado

Un grano en el párpado es un grano que se desarrolla en esta zona de la piel, del mismo modo que podría hacerlo en otras partes de la piel del cuerpo. No se debe olvidar que, el párpado, aunque esté compuesto por una piel muy fina, es piel, igual que la del resto del cuerpo. En este sentido, puede manifestar enfermedades similares a la del resto de zonas cutáneas y, los granos, son uno de estos problemas.

En estos casos, la mayoría de veces estaremos ante uno de estos tipos de granos en el párpado: 

  • Chalazión: un chalazión se produce cuando se obstruye una glándula sebácea del ojo. Lo más habitual es que se trate de una pestaña, por lo que suelen aparecer en el extremo del párpado. 
  • Orzuelo: el orzuelo es similar al chalazión pero, en este caso, se produce cuando la glándula sebácea obstruida se infecta. Por lo general, se trata de una infección bacteriana, y se manifiesta como inflamación y molestia en el párpado del ojo, ya sea en el párpado superior o en el inferior. 

En ciertas ocasiones, es necesaria la intervención del oftalmólogo, especialmente si el orzuelo se ha enquistado o presenta complicaciones. En estos casos, es habitual que lo que se haga sea drenar un orzuelo, lo que permite expulsar parte del contenido de su interior y así facilitar la curación. 

En cualquier caso, hay que tener en cuenta que se trata de una operación que deberá llevar a cabo siempre un médico, ya que nunca se debe intentar manipular un orzuelo por parte del propio paciente.

grano en el ojo

¿Por qué se producen los granos en los ojos?

La aparición de estos granos suele estar asociada a la infección, inflamación y taponamiento de una glándula:

  • Glándulas de Meibomio: en este caso, cuando se infectan se produce un orzuelo y cuando se enquista provocan un quiste de grasa o un chalazión.
  • Glándulas sebáceas de la piel de los párpados: pueden producir pequeños quistes sebáceos cuyo aspecto es más blanquecino.
  • Glándulas de Moll: son glándulas sudoríparas que están situadas cerca de la base de las pestañas. También se pueden bloquear e infectar provocando quistes de pequeño tamaño y de un aspecto traslúcido y acuoso.
  • Quistes epidermoides: son menos frecuentes y suelen aparecer desde el nacimiento, aunque pueden aumentar de tamaño a medida que el niño va creciendo. Son benignos y se pueden extirpar mediante una pequeña intervención quirúrgica.

Cuando se produce la infección de alguno de estos tejidos, esto puede provocar la inflamación de la zona y que termine apareciendo un grano en el ojo.

Las infecciones pueden ser tanto bacterianas como víricas. Por ejemplo, las causadas por el virus del papiloma humano (VPH).

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¿Sabes identificar un grano en el ojo?

La mayoría de veces, los granos en los ojos se deben a la existencia de un chalazión o de un orzuelo. Ambos son parecidos y, precisamente por esto, puede ser difícil distinguirlos. La principal diferencia la encontramos en que el chalazión no presenta dolor al tacto y, al no haber infección, tampoco presenta mucosidad en la zona. Por el contrario, el orzuelo resulta doloroso al tacto y, en el caso de que la infección sea bacteriana, es habitual que aparezca mucosidad en el ojo. Al secarse, esta mucosidad formará legañas que, además de molestar, dificultan abrir y cerrar el ojo con normalidad. 

En ambos casos, es muy importante mantener una correcta higiene de la zona usando agua y jabón para limpiarla. En el caso del chalazión para evitar que se infecte. Y en el caso del orzuelo para evitar que la infección se agrave o extienda a otras zonas del ojo. 

¿Cómo se tratan y cuándo se debe acudir al médico por un grano en el ojo?

El tratamiento de un grano en el ojo dependerá de cada caso en concreto. Por ello, es necesario acudir al oftalmólogo para que realice una exploración y recomiende el tratamiento más adecuado en cada caso. 

En general, se deberán seguir las siguientes recomendaciones: 

  • Medicamentos específicos: después de ir al oftalmólogo, el médico nos recetará medicamentos concretos para cada tipo de grano en el ojo. Por ejemplo, en el caso de un orzuelo con una infección bacteriana, se recomendarán pomadas antibióticas. Mientras que, en el caso de una infección vírica, se recomendarán pomadas con principios activos antivirales. 
  • Mantener una correcta higiene: para evitar que el grano en el ojo empeore y que cualquier infección pueda extenderse a otras zonas de los ojos, es muy importante mantener una correcta higiene en toda la zona. 
  • Usar lágrimas artificiales: las lágrimas artificiales ayudan a mantener hidratada y lubricada la superficie del ojo. De esta forma, se contribuye a que el propio ojo se limpie con más facilidad y se reducen las molestias causadas por el grano en el ojo. 
  • No tocarse los ojos con las manos sucias: si se van a tocar los ojos, es indispensable hacerlo con las manos limpias. Es recomendable lavarlas con agua y jabón antes de tocarse los ojos. 
  • No maquillarse: el maquillaje contribuye a crear una capa de grasa y suciedad en la superficie de la piel alrededor del ojo. Hasta que el grano en el ojo no desaparezca, se debe evitar el uso de cualquier tipo de maquillaje y cremas de contorno de ojos. 
  • No usar lentillas: las lentillas contribuyen a irritar la superficie del ojo y pueden dificultar su correcta hidratación. Hasta que el grano desaparezca, se debe evitar su uso. 
  • Desinfectar las lentillas y su estuche: para evitar posibles contagios entre distintas partes de los ojos, se deben desinfectar correctamente tanto las lentillas como su estuche. 
  • Revisión del médico: para asegurar la correcta curación del grano en el ojo, es indispensable acudir al médico para que este pueda revisarlo y recomendar el tratamiento más adecuado en cada caso. 

¿Qué hacer si te sale un grano en el ojo?

Los granos en el ojo pueden tener distintas causas. Lo más común es que en realidad sean un orzuelo o un chalazión. En cualquier caso, lo más importante que hay que tener en cuenta es que nunca se debe intentar explotar un grano en el ojo. Lo más recomendable será siempre acudir al oftalmólogo para que pueda revisarlo y prescriba el tratamiento más recomendable en cada caso. 

¿Cómo eliminar los granitos en el área del ojo?

Debido a que tanto los párpados como la piel de alrededor de los ojos es muy delicada y sensible, si queremos eliminar los granitos que pueden aparecer en esta zona, debemos ir al oftalmólogo. El oftalmólogo revisará el estado del paciente y podrá extirpar cualquier quiste o granito que pueda aparecer en esta zona, tanto si se trata por una cuestión de salud como de estética. 

Artículo revisado por la Dra. Ángeles Giménez-Almenara, oftalmóloga de Clínica Baviera.

Fuentes

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