Si notas que tienes un párpado más cerrado que el otro es posible que sufras de una ptosis que te ha afectado a un solo ojo.
Este problema afecta generalmente al párpado superior, y suele estar causado por el mal funcionamiento de alguno de los músculos encargados de levantar la estructura del párpado. Puede afectar tanto a un solo párpado como a ambos.
Si quieres saber más sobre las causas y sobre los tratamientos que existen para solucionar este problema sigue leyendo y te lo contamos.
¿Por qué tengo un párpado caído?
Tener un párpado más cerrado que el otro es una anomalía ocular que puede deberse a diversos motivos:
- Causa genética. Tener antecedentes familiares de esta enfermedad o haber nacido directamente con ella, lo que puede afectar al desarrollo visual del niño. También puede ser síntoma de algunas enfermedades musculares.
- Mal funcionamiento de los músculos. Los músculos que se encargan de elevar la estructura del párpado (músculo elevador del párpado) pueden deteriorarse por el paso del tiempo. En este sentido, el propio envejecimiento del cuerpo puede ser la causa directa de que un párpado aparezca más cerrado que otro.
- Aparición de un quiste o tumor en dicha zona. Aunque no son las causas más habituales, también existe la posibilidad de que aparezca un quiste o un tumor en el párpado o en el resto de estructuras de alrededor. Esto podría provocar la aparición de un párpado caído, lo que se conoce como ptosis mecánica.
¿Cómo se diagnostica?
La única forma de diagnosticar una ptosis o un párpado caído es yendo al oftalmólogo. El oftalmólogo será el encargado de revisar el estado de los párpados y del resto del ojo.
Una vez diagnosticado, se procede a prescribir el tratamiento de la ptosis más recomendable según cuál sea el origen del problema.
¿Qué soluciones existen para los párpados caídos?
Existen diversas soluciones que nos ayudan a contrarrestar la aparición de los párpados caídos:
Fortalecer los músculos con los ejercicios adecuados
Cuando la causa de tener uno o los dos párpados caídos es el envejecimiento natural, esta situación puede mejorarse, o al menos lograr que no vaya a más, con la realización de los ejercicios adecuados.
Una posible rutina de ejercicios enfocados a fortalecer los músculos alrededor de los ojos sería esta:
- Abre y cierra los ojos. Si se quiere ganar en efectividad hay que cerrar con fuerza y abrirlos, lentamente, durante 5 segundos.
- Presiona las cejas. Este ejercicio consiste simplemente en colocar los dedos índices sobre las cejas y hacer presión hacia abajo. Mientras tanto, hay que intentar levantar las cejas haciendo toda la fuerza posible.
- Mueve los ojos en el sentido de las agujas del reloj. Este ejercicio se realiza sentado, manteniendo espalda y cuellos bien erguidos al tiempo que se hacen círculos con la mirada. Hay que seguir la dirección de las agujas del reloj y luego al contrario.
- Estira la piel hacia atrás. Se trata de colocar varios dedos de las manos en las dos sienes y estirar la piel hacia atrás. Mientras tanto, se abren y se cierran los ojos repetidamente y con rapidez.
La solución quirúrgica: la blefaroplastia
En los casos en que la caída del párpado sea tan severa que llegue a dificultar la visión del paciente, puede ser conveniente realizar una intervención quirúrgica orientada a la corrección del músculo que se encuentra en la parte superior del párpado. Se la conoce como blefaroplastia. La decisión de realizar o no esta intervención la debe valorar siempre un oftalmólogo.
La blefaroplastia es una cirugía sencilla, se realiza de forma ambulatoria mediante anestesia local y no suele durar más de 30 minutos. Además, el postoperatorio es menos molesto que en el caso de otras operaciones. El paciente suele estar totalmente recuperado pasados 15 días. No obstante, sí que es importante que esta operación la lleven a cabo profesionales debidamente cualificados y con experiencia previa.
Una operación de párpado caído se divide en las siguientes etapas:
- En primer lugar, normalmente el equipo médico le administra al paciente un medicamento que le ayude a relajarse de cara al procedimiento en sí mismo.
- A continuación, se inyecta un producto anestésico local para evitar el dolor durante todo el proceso.
- El siguiente paso es la operación en sí misma: el cirujano realiza pequeñas incisiones en los pliegues o dobleces de los párpados y luego retira con cuidado la piel flácida y el tejido que haya sobrado tras las incisiones.
- Después se procede a tensar los músculos del párpado que estaba caído.
- La cirugía finaliza con el cierre de las incisiones realizadas al principio.
¿Qué puedo hacer si tengo el párpado caído?
Cuando un paciente tiene el párpado caído y quiere solucionar este problema, una posible solución, que siempre debe ser valorada por un especialista, es someterse a una blefaroplastia o cirugía del párpado.
Gracias a esta intervención se elimina la parte sobrante de la piel del párpado y se consigue volver a colocar el párpado en su posición original, con lo que logra un rejuvenecimiento de la mirada.
Artículo revisado por la Dra. Andrea Sales, oftalmóloga de Clínica Baviera.
Fuentes
- https://www.aao.org/salud-ocular/enfermedades/que-es-la-ptosis
- https://www.aao.org/salud-ocular/tratamientos/cirug%C3%ADa-de-párpado