Las patologías oculares se pueden manifestar de muchas formas diferentes. Según sea el caso, estaremos ante un tipo de patología u otra, lo que también definirá el tratamiento que el paciente tenga que seguir. Por otro lado, algunos problemas son transitorios mientras que otros pueden convertirse en crónicos y afectar seriamente a la visión.
En cualquier caso, siempre debemos ser conscientes de la importancia del cuidado de la visión y de la prevención para evitar posibles enfermedades oculares. Para ello, debemos ponernos en manos de un oftalmólogo que será quien determine qué tipo de patología ocular padecemos y cuál será el tratamiento más adecuado en cada caso.
¿Qué es una patología ocular?
A la hora de hablar de patología ocular se está haciendo referencia a enfermedades de los ojos. Como es lógico, estas enfermedades pueden estar causadas por diferentes factores, así como tener mayor o menor impacto en la vida y la salud del paciente.
Aunque las patologías oculares se pueden categorizar de diferentes formas, una de las más sencillas es hacerlo según el origen de la patología, lo que daría el siguiente resultado:
- Patologías oculares de origen genético:
Se trata de enfermedades del ojo que tienen su origen la propia naturaleza del paciente. Se trata de enfermedades que suelen manifestarse como una deformación del ojo que impide que la visión sea todo lo buena que cabría esperar. Algunos ejemplos de este tipo de patologías son la miopía o la hipermetropía.
- Patologías oculares degenerativas o asociadas a la edad:
Se trata de enfermedades del ojo que tienen su origen en la degeneración de algunos de los tejidos oculares, lo que conlleva la aparición de problemas que no están asociados a la genética del paciente. Un ejemplo de ello podría ser la presbicia.
- Patologías oculares de origen infeccioso:
En este caso, se trata de patologías oculares que tienen su origen en una infección causada por un agente externo, como pueden ser virus, bacterias u hongos. Un ejemplo de este tipo de patología sería una conjuntivitis.
¿Cuáles son las patologías oculares más comunes?
Aunque existen una variedad de patologías asociadas a la salud ocular muy amplia, las más comunes son las siguientes.
En la infancia
- Miopía.
- Hipermetropía.
- Astigmatismo.
- Daltonismo.
- Estrabismo.
- Ojo vago.
En la adolescencia
- Queratocono.
- Dolores de cabeza asociados a problemas refractivos.
- Síndrome visual informático y síntomas asociados, como el ojo rojo.
En la edad adulta
- Ojo seco.
- Blefaritis.
- Orzuelo.
- Conjuntivitis
- Queratitis.
- Uveítis.
- Cataratas.
- Desprendimiento de retina.
- Moscas volantes.
- Glaucoma.
- Presbicia.
- Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE).
- Retinopatía Diabética.
¿Se pueden prevenir?
Uno de los factores clave que hay que tener en cuenta en el tratamiento de las patologías oculares es acudir al médico con frecuencia. En concreto, es importante acudir al oftalmólogo en dos casos concretos:
- Por un lado, siempre que notemos molestias o alteraciones tanto en los ojos como en la visión, ya que pueden ser síntomas de que algo no funciona bien en nuestros ojos.
- Por otro, es importante que se lleven a cabo las correspondientes revisiones que nos permitan prevenir la aparición de enfermedades o patologías oculares. Lo más recomendable es que estas revisiones se lleven a cabo una vez al año. Aunque, en el caso de pacientes que deban tener un seguimiento más habitual, se deberán llevar a cabo según las indicaciones del médico correspondiente.
Fuentes
- National Eye Institute – Enfermedades y afecciones de los ojos
- MedlinePlus – Enfermedades de los ojos