En la actualidad, una bu5ena parte de la población mundial pasa muchas horas delante de la pantalla del ordenador. El auge de los smartphones y de las tablets ha incrementado el tiempo que estamos sometidos a la luz de las pantallas, tanto en el entorno laboral como durante el tiempo libre y de ocio.
En este artículo repasamos las molestias visuales que puede generar el uso de las pantallas y cómo combatirlas.
¿Qué molestias pueden causar las pantallas en los ojos?
Organismos internacionales, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), reconocen que estar expuestos a la luz emitida por las pantallas de los dispositivos electrónicos supone un riesgo para la salud visual. El uso excesivo de pantallas se ha vinculado, incluso, con un mayor desarrollo de la miopía, especialmente en el caso de pacientes jóvenes y niños.
El uso excesivo de las pantallas es un mal hábito difícil de solucionar. El español medio pasa más de cuatro horas frente a la pantalla en su trabajo y a esto hay que sumar las horas que usamos este tipo de dispositivos durante nuestro tiempo libre.
La molestia más común que se deriva del uso excesivo de pantallas es la fatiga ocular. Los síntomas de la fatiga ocular son conocidos por la mayoría de quienes trabajan con el ordenador:
- Visión borrosa o visión doble.
- Sensación de cansancio y dificultad para mantener la atención.
- Dolor de cabeza y ojos.
- Lagrimeo excesivo.
- Sequedad ocular.
- Picor de ojos.
- Molestias al exponerse a la luz.
- Problemas para enfocar de forma inmediata.
- Enrojecimiento.
Sin embargo, la culpa no es en sí de las pantallas, sino del modo en que las usamos y del tiempo que pasamos frente a ellas.
La mayor parte del daño que causamos a nuestros ojos mientras estamos frente a una pantalla se debe a que parpadeamos menos de lo necesario. Esto no solo sucede con las pantallas, sino que ocurre en general cuando realizamos una tarea que nos requiere un alto nivel de concentración. La buena noticia es que podemos tomar medidas para evitar estas molestias en los ojos.
¿Cómo debemos mirar las pantallas?
Aprender a mirar la pantalla y hacer un uso responsable nos ayudará a evitar gran parte de las molestias en los ojos que ésta nos pueda causar. En el caso de los ordenadores, los siguientes consejos nos pueden ayudar.
Hidratar y lubricar frecuentemente los ojos
Al parpadear hidratamos y lubricamos nuestros ojos. Cuando estamos delante de la pantalla, la frecuencia de este acto reflejo se reduce de manera considerable. Por esta razón, cuando estamos delante de una pantalla es importante recordar la importancia del parpadeo. Lo ideal es que no pasen más de 10 segundos entre un parpadeo y otro.
Aunque el parpadeo natural debería ser suficiente para lubricar e hidratar los ojos, en aquellos casos en los que se padece ojo seco lo más recomendable es complementar la lubricación del ojo con lágrimas artificiales. Este producto se vende libremente en las farmacias y tiene una composición muy similar a la lágrima natural.
Realizar periodos de descanso
Tanto si se estudia como si se trabaja delante de un ordenador, es fundamental realizar periodos de descanso que permitan relajar los ojos.
Lo más recomendable es que estos descansos se lleven a cabo cada hora y duren al menos cinco minutos.
No usar otras pantallas durante los descansos
Parece muy obvio, pero usar el teléfono móvil se ha convertido en un acto reflejo. Durante los descansos no sirve de nada dejar de mirar el ordenador para usar el móvil (por ejemplo, para consultar las redes sociales o los chats activos). En su lugar, es recomendable parpadear bastante y fijar la mirada en objetos lejanos, por ejemplo, a través de una ventana.
Mantener la distancia adecuada con la pantalla
Otro elemento que no se puede pasar por alto para proteger nuestros ojos del daño que causa la pantalla del ordenador es conservar una distancia adecuada entre estos y dicha pantalla.
En términos generales, la pantalla del ordenador debe estar situada a una distancia de entre 50 y 60 cm. de nuestros ojos y justo delante de ellos, de modo que el cuello pueda conservar una posición neutral y no forcemos las vértebras cervicales ni los músculos de esta parte del cuerpo. Lo ideal es que tengas que estirar tu brazo para tocar la pantalla, lo cual es un problema cuando se usan ordenadores portátiles.
Usar una correcta iluminación ambiental
- Es recomendable que la luz que usamos sea natural, aunque la luz artificial también puede ser adecuada.
- La luz debe ser suficiente para ver correctamente, tanto la pantalla como el resto de la habitación.
- También es importante el punto de origen o foco de la luz ambiental. La luz debe proceder siempre del techo o de un lateral de la pantalla. Se debe evitar colocar la pantalla del ordenador frente a una ventana o contra esta. Por lo tanto, lo correcto será que la ventana de la habitación quede en el lateral del escritorio. Así evitaremos los reflejos y la falta de contraste.
- Es recomendable bajar el brillo de la pantalla, sobre todo si estamos trabajando con texto negro sobre blanco.
¿Qué precauciones debemos seguir con los móviles?
En cuanto a los móviles, también hay ciertas precauciones que tomar:
- Mantenerlo siempre por debajo del nivel de tus ojos, pero sin pasarse.
- Mirarlo desde una distancia prudencial, ni muy pegado a la cara ni muy alejado.
- Poner un tamaño de letra adecuado. Normalmente nos quedamos con el que aparece por defecto, pero esto no es obligatorio.
- Evitar mirarlo cuando le está dando el sol. En esta situación es muy complicado ver algo y esto obliga a subir el brillo de la pantalla. Es preferible buscar un lugar a la sombra.
- Ajustar el brillo y el contraste no solo protegerá nuestros ojos sino que también hará que ahorremos batería.
Estas son solo algunas medidas para prevenir las molestias en los ojos causadas por un esfuerzo excesivo frente a la pantalla. Lo ideal sería reducir el número de horas de uso, en la medida de lo posible.
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