Los alimentos con magnesio y zinc juegan un papel muy importante en la salud de nuestros ojos. De hecho, ambos minerales nos ayudan a prevenir enfermedades oftalmológicas como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) y las cataratas, por lo que es importante que estén presentes en nuestra dieta de manera habitual. Además, el zinc es fundamental a la hora de producir melanina, un pigmento que nos ayuda a ponernos morenos, y también protege nuestros ojos.
Artículo revisado por el Dr. José Ignacio Valls, oftalmólogo de Clínica Baviera.